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Alargamos la vida útil de barricas de roble
El deterioro de las barricas y su incidencia en la calidad de los vinos que en ellas se crían, representa para Marclean una oportunidad para aportar valor añadido al sector vitivinícola.
El deterioro de las barricas está determinado por varios factores:
- Formación de posos de bitartratos (ácido tartárico)
- Desarrollo bacteriano
- Reducción progresiva de la capacidad de oxidación
- Disminución de la aportación de sustancias agradables al vino
Estos factores no son independientes, sino que dependen unos de otros de forma secuencial.
Las cepas bacterianas se ocultan en la madera y llegan a bloquear su estructura porosa. Esta situación incide en la calidad del vino que se ve mermada por la disminución de la micro-oxidación que redunda en la estabilización del color. También incide en la disminución de la aportación de los sabores propios de la madera.
Especialmente grave es la proliferación de depósitos de bacterias de difícil eliminación ya que se ocultan en la estructura interna de la madera bloqueando su porosidad y apareciendo cuando las barricas están en pleno proceso de crianza. Además de contaminar el vino, provocan un cambio en sus propiedades organolépticas.
Por ello, la industria vitivinícola se ve obligada a renovar cada pocos años, la práctica totalidad de su dotación de barricas.
Metodología contrastada para la recuperación de barricas.
En Marclean venimos desarrollando de manera exitosa una metodología contrastada que permite la recuperación y el alargamiento de la vida útil de las barricas de roble para la elaboración de vinos.
La ozonización de las Barricas, consiste en la inyección directa dentro de las barricas de gas Ozono en varias etapas, previo lavado a presión para la eliminación de los depósitos de tartratos residuales.
El Ozono actúa dentro de las barricas introduciéndose completamente en la estructura de poros de la madera. Como resultado, dado su poder oxidativo y esterilizante, destruye a nivel molecular las cepas de microorganismos: bacterias, levaduras contaminantes, hongos, mohos, bacterias acéticas, bacterias lácticas y cualquier otra sustancia ajena a la naturaleza propia del roble y evita y elimina el TCA (Tricloroanisol) esa sustancia química que contamina el vino alterando sus propiedades organolépticas, provocando que este tome un bouquet a húmedo y mohoso.
Con esta metodología, conseguimos la recuperación de las barricas a su estado inicial, esterilizándolas y liberando la estructura porosa por desintegración molecular y posibilitando de nuevo la micro-oxidación de la barrica.
Después de este proceso podemos garantizar la recuperación de la barrica para otros 3-4 años y aplicado de forma recurrente nos permite alargar la vida útil de las barricas de madera de forma indefinida.
Garantías:
Podemos certificar los resultados de nuestros tratamientos de ozono para bodegas, existiendo también la posibilidad de efectuar una toma de muestras del interior de las barricas y ser analizadas por nosotros o por un laboratorio acreditado que garantice el proceso de recuperación.
Contacto:
No dudes en contactar con nosotros, estaremos encantados en ampliarte la información que requieras sobre nuestro servicio de recuperación de barricas de roble.
Consulta nuestra metodología para la limpieza de Bodegas. La preparación de nuestro personal por parte de ITEL (Instituto Técnico Español de Limpiezas) perteneciente al Centro de Investigación y Asesoramiento para la Higiene, avalan la garantía de nuestro servicio.
